OIMAKU de la Selectividad

OIMAKU de la Selectividad y los tantos nervios que me produjo. Recuerdo que el primer día me quedé muy impresionado porque en uno de los pasillos para acceder a las aulas podía leerse una cita brutal de Galeano. Recuerdo también lo fácil que fue el examen de castellano y que el texto de una de las opciones de la prueba de inglés hablaba de Bob Marley. El pronóstico del profesor de filosofía fue nefasto porque apenas nos explicó a Freud convencido de que no saldría y, ¡bang!, la primera en la frente. No olvidaré tampoco nunca cómo suspendí el examen de Historia del Arte teniendo el Partenón como primera obra a comentar, cuando el profesor había gastado casi la mitad del curso impartiendo arte antiguo. Curiosamente, sin tener ni idea, conseguí todos los puntos con una pintura contemporánea de no sé quién. Creo que aparecía un profesor de halterofilia con bigote.